El aceite esencial 100% puro es la sustancia concentrada obtenida de plantas, que captura el aroma y las propiedades medicinales de la planta de origen. Se extrae principalmente por destilación al vapor, aunque también puede hacerse por prensado en frío o mediante solventes. Estos aceites contienen compuestos volátiles que tienen un fuerte aroma y propiedades terapéuticas que se utilizan en aromaterapia, cosmética, y medicina tradicional.
Cada aceite esencial tiene sus propias características y beneficios, dependiendo de la planta de la que provenga.
Jengibre
Mejora la digestión: Ayuda a aliviar problemas digestivos como la indigestión, los cólicos y la hinchazón. También es conocido por su capacidad para reducir náuseas, incluyendo las provocadas por el mareo o el embarazo. Propiedades antiinflamatorias y analgésicas: El jengibre tiene efectos calmantes sobre los músculos y las articulaciones, ayudando a reducir el dolor y la inflamación. Estimula la circulación: Es eficaz para mejorar la circulación sanguínea, lo que puede ser beneficioso para combatir la fatiga y mejorar la oxigenación de los tejidos. Refuerza el sistema inmunológico: Gracias a sus propiedades antimicrobianas, el aceite de jengibre es útil para prevenir infecciones y fortalecer el sistema inmunológico. Alivio de resfriados y congestión: Tiene un efecto descongestionante y puede ayudar a aliviar los síntomas de resfriados, tos y problemas respiratorios.